Durante el
Pleno Ordinario de ayer PP y Psoe manifestaron claramente que los intereses de
las entidades bancarias están por encima de los almonteños. Ambos partidos
hicieron bloque conjunto para votar contra la moción de Izquierda Unida sobre establecer
criterios de prioridad para atender los pagos del plan de proveedores y
declaración de ilegitimidad de parte de dicha deuda.
En la
exposición de motivos el Concejal-portavoz Daniel Martínez hizo un análisis
sobre el origen de la deuda de 12 millones de euros suscritos al ICO a través
del RDL 4/2012. Destacó que en 2009 el Ayuntamiento de Almonte gestionado por
Psoe ya acumulaba 8,7 millones de euros de remanente negativo de tesorería y 16
millones de euros de deuda viva. Para la reducción de esa cuantía se acogió al
RDL 5/2009 de iguales características al dispuesto el pasado año por el
gobierno central. Para entonces el Ayuntamiento de Almonte en un informe decía
que la situación financiera era preocupante. Si actualmente se mantiene una
deuda de 28 millones de euros con las entidades financieras, y si a partir de
2014 el Ayuntamiento de Almonte comenzará a pagar 5 millones de euros
exclusivamente a los Bancos ¿en qué situación no se encontrará la
administración local para entonces?
Para ello
Izquierda Unida propuso dos soluciones. La primera reducir la deuda en 600.000
euros declarando ilegítima la parte proporcional al beneficio del interés que
los bancos sacan del préstamo de los 12 millones de euros del RDL 4/2012. Los
Bancos recibieron ese dinero al 1% de interés de Banco de España y lo vendieron
al 5-7% a los Ayuntamientos, lo correcto hubiese sido la transferencia directa
entre Banco de España y Ayuntamiento al 1%. La segunda de las propuestas
consistía en establecer criterios de prioridad a la hora de hacer frente al
pago de los 1,4 millones de euros anuales que a partir de 2014 vamos a empezar
a pagar y que están sujetos al RDL 4/2012. Estos criterios de prioridad
estarían orientados a la prestación de los servicios públicos municipales, pago
de nóminas a los empleados, inversiones y generación de empleo local, para dejar en última opción el pago a los Bancos.
Izquierda
Unida en boca de su Portavoz planteó tanto a PP como Psoe una política lucha
conjunta frente a las administraciones y entidades bancarias para lograr poner
freno a estos abusos y a la estafa que están sufriendo los pueblos. Porque está
en juego el futuro de nuestro Ayuntamiento y por supuesto de Almonte. La
respuesta de PP y Psoe consistió en votar contra la Moción de Izquierda Unida.
#Almonteesloprimero